PalabrasVivas sobre Las Finanzas

• Desprendimiento: Volando alto en el Espíritu
  ¿Qué significa “nacer de lo alto”? En Juan 3, 7b-15, Jesús nos explica qué es ser guiado por Dios, aun cuando no sepamos a dónde nos lleva. Significa ser libres de flotar en el Espíritu en cualquier momento, en cualquier dirección, porque no estamos apegados a este mundo, aunque es lo que tocamos, olemos, miramos, percibimos audiblemente y controlamos.

• Consejos sobre las finanzas desde la Palabra del Señor
  Si he puesto mi confianza en el oro…si me regocijo en mi gran riqueza, en la fortuna que han ganado mis manos, entonces éstos serán los pecados por los que seré juzgado, porque habré sido infiel a Dios en lo alto. (Job 31, 24.25.28) Podrías decirte a ti mismo: “Mi poder y la fuerza de mis manos han producido esta riqueza para mí.” Pero recuerda al Señor tu Dios, porque es Él quien te da la habilidad para producir riquezas. (Deuteronomio 8, 17.18)

• Obteniendo libertad financiera a la manera de Dios
  ¿Estás acosado por las preocupaciones financieras? ¡Dios quiere que estés libre de ansiedades! Aprende cómo manejar el dinero con la sabiduría de Dios y pon fin a tus preocupaciones. Aquí tienes 7 claves espirituales para lograr una verdadera libertad financiera, usando citas de Santos, Papas y Escrituras con comentarios de Terry Modica. (1) CALIFICA TU SABIDURÍA SOBRE LIBERTAD FINANCIERA (2) DEJA QUE DIOS SATISFAGA TODOS TUS DESEOS (3) CONTÉNTATE CON MENOS PARA RECIBIR MÁS, etc.

• Identificando tus verdaderos tesoros
  Si no podemos ver o imaginar cuáles son nuestros verdaderos tesoros, entonces estamos ciegos dice Jesús en Mateo 6, 19-23. Si consideramos como valioso todo lo que muere o podría ser robado, estamos viviendo en la oscuridad en un mundo desolado, cínico y desesperanzador. Mira 2 Corintios 11, 18-30 y mira cuánto sufrió San Pablo en su pasión por servir al Reino de Dios. Sin embargo no se sentía desolado, cínico o desesperanzado. No se quejaba. ¿Por qué no?

• Ofrenda de Sacrificio (Testimonio Personal de Terry y Ralph Modica)
  Cómo aprendimos a superar nuestros miedos.
  Ralph: Los caminos de Dios no son nuestros caminos. Los pensamientos de Dios son más elevados que los nuestros. Estamos aquí para compartir con ustedes nuestro camino, aprendiendo de Dios sobre la Ofrenda de Sacrificio.
  Terry: En 1975, cuando estábamos recién casados, no sabíamos que Dios se preocupaba de nuestras necesidades diarias. Pero, entonces, leímos Mateo 6, 25-26:»No se preocupen por sus vidas… Miren los pájaros en el aire… Su Padre del cielo los alimenta. ¿No son ustedes más valiosos que ellos?»

• Probando a Dios con mis finanzas (Testimonio Personal de Nancy Viola)
  Yo estaba respondiendo, no con demasiada fe, pero en respuesta a un reto. Yo estaba, realmente, probando a Dios, para ver qué haría con las finanzas. Necesitaba que Él interviniera en mi vida tan desesperadamente. Necesitaba que Él fuera mi PROVEEDOR. Necesitaba que «abriera las compuertas del cielo y derramara tantas bendiciones sobre mí que no pudiera contenerlas.» ¿Sabían que no pueden dar más que Dios? Bueno, yo no lo sabía. Yo pensé que si daba hasta que doliera, me iría a mi casa doliéndome más por lo que había dado. Pero eso nunca sucedió. De alguna forma, a través de algunos medios, Dios tenía hermosas bendiciones esperándome en las alas, justo para aquellas ocasiones en que más lo necesitaba.

• La decisión que hace la diferencia (Testimonio Personal de Fernando Ramos)
  Cuando pasamos por tiempos de dificultades importantes, son, justamente, nuestra fe y nuestra confianza las que se ponen a prueba. Es entonces que podemos saber, en realidad, cuánto creemos que Dios puede, quiere y hará un cambio para bien en nuestras vidas. También podemos palpar en qué medida confiamos en su bondad, en que nos mira constantemente, en que se preocupa por nuestra situación, en que no nos defraudará ni demorará más del tiempo fijado sus planes de bien para nuestras vidas.

• El día que mi tarjeta de débito fue robada
  Una oleada de pánico, me invadió. Sentí que mi corazón se me iba al estómago. “No puede ser real,” pensé. Me habían robado la información de mi tarjeta de débito. Mis miedos no duraron mucho porque, como siempre, Dios tiene un plan. Esta es la historia de cómo un robo de identidad me acercó más a Dios. En un principio pensé que se trataba de un error: obviamente no había manera que yo hubiera gastado ese dinero, había estado en esa aburrida sesión toda la mañana. Así que entré en mi cuenta bancaria para investigar más. Lo que encontré me impactó, una larga lista de múltiples cargos hechos todos en California usando los ahorros de toda la vida. La cantidad continuaba incrementándose.