La Maratón del Rosario
para expulsar al mal
de la Santa Iglesia Católica
¡Únete al Apostolado de la Maratón del Rosario!
Todas las formas de abuso son malvadas e inspiradas por demonios. La Bienaventurada Madre ha dicho muchas, muchas veces en apariciones en todo el mundo que debemos rezar el Rosario para vencer al mal. Ella nos ha advertido, una y otra vez, que si no vivimos vidas santas y oramos para derrotar al mal, nos sucederán cosas terribles, muy terribles. Por eso estamos ofreciendo la Maratón del Rosario como algo que puedes hacer.
Las Advertencias de la Bienaventurada Madre en Fátima
El Papa San Juan Pablo II dijo: «El mensaje de Fátima es un llamado a la conversión, alertando a la humanidad para que no tenga nada que ver con el «dragón» cuya ‘cola derribó un tercio de las estrellas del cielo y las arrojó a la tierra’ (Apocalipsis 12, 4).» (Mayo 13, 2000, en su homilía durante la beatificación de los Beatos Jacinta y Francisco.)
Mucho antes, en su papado, había predicado: «Puede la Madre, con toda la fuerza de su amor en el Espíritu Santo y su deseo de salvación para todos, permanecer en silencio cuando ve que la mismísima base de la salvación de sus hijos es socavada? No, ella no puede permanecer en silencio.» Los mensajes de Fátima, reveló, se refieren a la advertencia de Nuestra Señora de que se está socavando el fundamento de nuestra salvación. (Mayo 13, 1982)
Y hemos visto que ha sucedido. Tantos han abandonado la Fe. Muchos otros se dicen católicos sin vivir según las enseñanzas de la Iglesia. ¡Muy pocos saben, realmente, cuáles son las enseñanzas de la Iglesia! Tienen alguna idea, pero no lo suficientemente clara para protegerlos de las enseñanzas del mundo (las enseñanzas de Satanás).
¿Cómo llegamos a allí?
[ Noviembre 5, 2019] Todos los que hayan prestado atención a las noticias de la Iglesia han escuchado sobre los obispos que han ocultado los abusos de menores, sobre los seminaristas que han sido molestados y sobre la cultura de la homosexualidad (la «Mafia de la Lavanda») dentro de la Iglesia, forzando su influencia contra las enseñanzas de la Biblia y el Magisterio de la Iglesia.
Estamos alarmados de que el Papa Francisco haya permitido la adoración de ídolos paganos en la ceremonia en la Iglesia donde tuvo apertura el Sínodo de Amazonia y que, luego, haya dado a esos ídolos un lugar en la Basílica de San Pedro y en otros lugares.
También estamos confundidos por la falta de enseñanzas claras, por parte de este papa, sobre lo que es pecaminoso. ¿Recuerdas aquellos tiempos en que los Pastores declaraban algunas cosas «anatema» y predicaban sobre el pecado mortal y el infierno? Y nos preguntamos: ¿Es el Papa Francisco sólo un pobre comunicador o realmente está tratando de cambiar las enseñanzas de la Iglesia?
El Papa Gregorio Magno describió el rol del obispo como: «el perro guardián que cuida el rebaño de los lobos, advirtiendo al rebaño y alejando a los lobos de él.» San Bonifacio agregó: «El perro guardián que no ladra cuando hay amenazas para el rebaño es inútil y dañino.»
Mientras tanto, hemos aprendido que los obispos pecadores que no se han arrepentido, han sido promovidos a posiciones importantes e influyentes mientras que los obispos santos, que predican las verdaderas enseñanzas de la Iglesia, han sido «ignorados». También nos estamos dando cuenta de que los males coordinados cometidos por algunos miembros de la jerarquía, se remontan hasta 1960.
Mira lo que dice sobre esto el Arzobispo Carlo Maria Viganò:
¡Esta no es una batalla ordinaria sino una guerra! Es urgente que la resistencia católica esté fuertemente unida y sea visible frente al proceso en curso de auto-destrucción de la Iglesia. También para sobreponerse a «los muchos malosentendidos que a menudo dividen el campo del bien y buscan entre estas fuerzas una unidad de propósito y acción, mientras mantienen sus identidades legítimamente diferentes» (De Mattei).
En estas horas tan graves, los laicos son, sin duda, la cabeza de lanza de la resistencia. Por su coraje deben apelar a nosotros los pastores y animarnos a ir hacia adelante, con más coraje y determinación para defender a la Novia de Cristo. La advertencia de Santa Catalina de Siena está dirigida a nosotros los pastores: «Abran sus ojos y miren la perversión de muerte que ha entrado al mundo y, especialmente, en el Cuerpo de la Santa Iglesia. ¡Pobres de nosotros, que nuestros corazones y almas exploten al ver tantas ofensas contra Dios! ¡Pobres de nosotros, ya es suficiente el silencio! Gritemos con cientos de miles de lenguas. Veo que, por el silencio, el mundo está muerto, la Novia de Cristo está pálida!»
Las personas me han preguntado: «¿Qué podemos hacer con el mal en la Iglesia?»
¡Hablar!
La Ley Canónica #212 dice en el párrafo 3 que nosotros, los fieles cristianos: «tenemos el derecho, incluso el deber, según su conocimiento, competencia y posición, de manifestar a los Pastores sagrados sus observaciones sobre temas que conciernen al bien de la Iglesia. Tienen el derecho, también, de hacer conocer sus observaciones a otros fieles cristianos, pero al hacerlo siempre deben respetar la integridad de la fe y la moral, mostrar debida reverencia a los Pastores y tener en cuenta tanto el bien común como la dignidad de los individuos.»
Este es el primer paso. Pero ¿qué pasa si nada cambia? El problema se hace mucho más profundo y abarca mucho más de lo que la mayoría de nuestros santos pastores y obispos pueden enfrentar de manera efectiva. La Iglesia está siendo atacada desde dentro. Estos males son la obra del demonio. Siempre lo ha sido y siempre lo será. Necesitamos empuñar un arma que conquiste a los demonios. La Bienaventurada Madre nos ha dado el Rosario para esto.
La Maratón del Rosario
He aquí cómo funciona:
- Encuentra, al menos, un amigo o amiga para que lo haga contigo. Cuanto más grande sea la comunidad que juntes, mejor. Si comienzas con una persona, el Señor proveerá más cuando vean lo que estás haciendo.
- Reúnete con tu pastor para informarle que estarás rezando el Rosario por él y por la renovación de la Iglesia. Si es un pastor santo, dile que esto significa que estarás orando para que el mal sea expulsado de la Iglesia. Si es parte del problema por el que estarás orando, no le muestres tu enojo, pero ve preparado con una carta que, amable y respetuosamente, muestre lo que recomienda la Ley Canónica #212. Si no es seguro hacer esto personalmente, envíale la carta en un sobre sellado a través de la oficina parroquial. Guarda una copia de la carta para ti.
- Haz el compromiso de continuar con la Maratón del Rosario hasta que ya no sea necesario, como mínimo de lunes a viernes, con lluvia o sol, frío o calor, sin importar lo que suceda. Cuando uno está incapacitado de hacer la Maratón del Rosario, debería haber otros miembros que la sigan rezando.
- Todos los que se unan a la maratón recibirán: «Las Reglas de la Maratón del Rosario» (solicítala más abajo).
- Cada día, antes de rezar la Maratón del Rosario, asiste a Misa lo más frecuentemente posible, puede ser Misa diaria si está a tu alcance. Esto es para purificarte mediante el Rito Penitencial y para renovar tu unión con Jesús en el Santísimo Sacramento.
- Comienza caminando todo el perímetro de la propiedad de la iglesia mientras rezas el Rosario, continuando hasta que hayas completado un circuito.
>> Deja que Jesús te asista más. Mira nuestros PalabrasVivas sobre La Crisis en la Iglesia.
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