Misterios Luminosos para la conversión del mundo : Volver al comienzo
EN EL MILAGRO DE CANÁ
Otro misterio de luz es el primero de los signos, dados en Caná (cf. Juan 2, 1- 12), cuando Cristo cambió el agua en vino y abrió los corazones de los discípulos a la fe, gracias a la intervención de María, la primera entre los creyentes. (Papa San Juan Pablo II, El Rosario de la Virgen María, pár. 21)
El tercer día, había una boda en Caná de Galilea y la madre de Jesús estaba allí. Jesús y sus discípulos también fueron invitados a la boda. Cuando se quedaron sin vino, la madre de Jesús le dijo: «No tienen vino.» Jesús respondió: «Mujer, ¿qué tengo yo que ver con eso? Mi Hora no ha llegado aún. Su madre les dijo a los servidores: «Hagan lo que Él les diga.»… Y, cuando el jefe de los mozos probó el agua que se había transformado en vino, sin saber de donde provenía (aunque los servidores sí sabían) el jefe llamó al novio y le dijo: «Todos sirven el buen vino primero y luego, cuando la gente ha bebido libremente, sirven uno inferior; pero tú has guardado el mejor vino para ahora.» Jesús hizo esto como el primero de los signos y así reveló su gloria, y sus discípulos comenzaron a creer en él. (Juan 2, 1-11)
Brillamos más intensamente con la luz de Cristo cuando obedecemos las intrucciones que Él nos da. Incluso, cuando la tarea no tiene sentido, si «hacemos todo» lo que Él nos dice, Él revelará Su gloria en nosotros y a través de nosotros.
Escucha Su voz mientras sigues con la oración del Ave María:
Pidiendo el don de un corazón abierto a la verdadera fe, alabamos a Dios:
Por mi conversión continua y por la conversión de todo el mundo, incluyendo _____,
Together we pray: