Por Josephine Tan:
Soy una creyente firme y doy testimonio de que Dios ama al dador alegre. Durante años descubrí que, cuando estaba peor económicamente, si escarbaba en mis recursos financieros para proveer a las necesidades de la iglesia y a mis hermanos menores, ¡era entonces cuando el Señor me mostraba, claramente, que su generosidad no puede ser superada!
Los últimos dos años de la pandemia son un claro ejemplo. Elegí ser generosa dando a mi iglesia en Singapur (que sufrió enormes problemas financieros por razones obvias) y a entidades de caridad en mi país y en el mundo, incluyendo a Good News Ministries. Ser un dador alegre y generoso me ha demostrado cómo es nuestro Señor y Padre omnipotente. Ha seguido bendiciéndome tan abundantemente desde entonces que ¡no puedo alabarlo, glorificarlo y agradecerle lo suficiente!
A través de Good News Ministries y de otros ministerios parecidos en el mundo, he sido tan abundantemente bendecida y edificada. Estoy en un asombro y alabanza constante y agradezco al Señor por su infaltable amor, su misericordia y compasión por mí.
Toda mi vida, nuestro Señor y su Madre María me han cuidado, me han protegido del mal y de las trampas del malvado, me han bendecido en todas mis necesidades (físicas, financieras y espirituales) y me han ayudado a crecer en mi camino de fe. Por eso, como dice en Malaquías 3, 10, cuando damos al Señor lo mejor de nosotros, ¡él nos sorprenderá multiplicándolo trillones de veces!
Para recibir tu propio milagro para compartir, ofrece una donación hoy. Estarás haciendo un gran impacto, cambiando al mundo al llevar la luz de Cristo a la oscuridad que parece estar ganando las vidas de tantas personas. Estarás renovando la Iglesia, persona tras persona, uniéndote a nosotros para activar la fe de más y más católicos.
Si deseas que Good News Ministries continúe, ayúdanos a alcanzar el objetivo de U$S40.000 para el comienzo del nuevo año.
|
Y ahora, Señor, permite que tus siervos proclamen tu palabra con valentía, mientras extiendes tu mano para sanar y hacer signos y prodigios mediante el nombre de Tu santo siervo Jesús. (Hechos 4, 29-30)